Llegó a Tepoztlán y tomó posesión de los cerros más altos […]
y como no podían llegar a él, quisieron derribarlo, cortando la base.Leyenda de Tepoztécatl (fragmento)
El Tepozteco es uno de los cerros más conocidos de Tepoztlán, porque en su cima se encuentra lo que en su tiempo fue el templo del rey tepozteco. Sí, la misma pirámide que se halla en la cima del cerro que fue edificada en 1150 d.C. aproximadamente y que fue dedicada a Ometochtli (Dios dos conejos), y a Tepoztécatl (Dios del Pulque, la fertilidad y la cosecha). Por ello cada 8 de septiembre se sube a la pirámide a poner una ofrenda en honor a Tepoztécatl, además de celebrarse la fiesta principal del pueblo de Tepoztlán hoy en día conocida como Reto al Tepozteco.
Conocido comúnmente como “Lugar donde abunda el cobre” ya que según sus raíces etimológicas “tepozt-tli” que significa fierro o cobre y “tlán” que significa abundancia o lugar, Tepoztlán en su toponimia se puede ver un hacha incrustada en una montaña quizá es por ellos que muchas personas llegan a comentar que los cerros de Tepoztlán fueron cortados con una gran hacha, como si en algún momento algunos gigantes hubieran esculpido a filo de hacha estos cerros.
Otras personas argumentando cierta lógica y poniendo ejemplos de otros lugares, comentan que en su momento Tepoztlán estuvo cubierto completamente con agua y conforme el nivel fue bajando, fue dejando esas marcas en los cerros; la idea tiene sentido, es incluso creíble ya que si observamos vestigios de otros lugares donde hubo agua, ésta deja rastros que indican como fue descendiendo, sin embargo, este no es el caso de Tepoztlán.
La cordillera de Tepoztlán es muy reciente —y con escribir reciente no quiero expresar que se formó hace un par de años o cientos quizá, sino que el tiempo de formación de estos cerros y montañas tiene por lo menos unos 20 millones de años— comparado con la formación de otras cordilleras que al menos datan de 100 millones de años. Es por ello que el eje neovolcánico transversal que forma parte de corredor Chichinautzin está encima de otras formaciones más antiguas; para resumir estos fantásticos cerros tuvieron su origen en 3 eventualidades:
La primera eventualidad fue la gran actividad volcánica que formó el eje volcánico transversal desde las costas veracruzanas hasta las de Nayarit, responsabilidad de las placas tectónicas de cocos y rivera ambas integrantes del cinturón de fuego del Pacifico, es por ello por lo que en los cerros de Tepoztlán podemos hallar rocas tipo ígneas, andesitas y basálticas de los volcanes de este eje.
El segundo evento fue la actividad tectónica de la zona, que fue la responsable de crear esas fracturas características tipo hacha, cortando las montañas en formas verticales, es también la responsable de crear valles y esos cortes que dan el escape de aguas para que Tepoztlán tenga pocas posibilidades de una inundación, aunque también esto hace que en ciertos tiempos haya escasez de agua en Tepoztlán, aunque cuente con un gran pozo natural hídrico bajo su valle.
La tercera eventualidad, también se debe a la actividad volcánica, aquella que formó la sierra del Chichinautzin, que fue la que depositó mucho material en las zonas bajas de Tepoztlán por las cuevas de San Juan Tlacotenco, prueba de ello son esos escapes de gases que hoy en día se convirtieron en cuevas subterráneas, mismas donde comentan está escondido el tesoro de Emiliano Zapata.
Las montañas fueron formadas por acumulación de depósitos volcánicos provenientes del norte; todas actividades poco amistosas y destructivas, que crearon este tipo de cortes en los cerros de Tepoztlán, dando figuras únicas que parecen sacadas de una película de ciencia ficción.
Pero esa anécdota no se queda ahí, ya que en nuestro Tepoztlán mágico casi todas las montañas tienen un nombre y algunas de ellas tienen sus propias historias, así que si te atreves a pasear por alguna de ellas aquí te contamos cuáles son sus nombres, además de las particularidades de cada una.
Es el primer cerrito que encontramos en la entrada de Tepoztlán. Su nombre proviene de cuauhnectli que en náhuatl quiere decir ´miel´ y tepetl que significa ´cerro´. Se llama así porque anteriormente había muchas colmenas en algunas de sus cuevas o laderas, incluso aún quedan algunas huellas de panales colgados en las rocas.
Este cerro es el que se encuentra del lado izquierdo de la subida al Tepozteco, también se le conoce con el nombre de ´Chicome ocelotepetl´ que quiere decir el ´cerro de los 7 jaguares´, ya que la palabra chicome es el número siete en náhuatl, y ocelotl que quiere decir ¨jaguar. Algunos sabios de Tepoztlán cuentan que en este cerro se puede distinguir la figura de un puma que se ve sobre todo en abril, si lo vemos desde el sur hacia el norte. Puedes intentar observarlo en esa época del año.
Este cerro se llama así porque parece la figura de un rey de perfil. Sobre sus hombros parece llevar puesta una capa adornada con grecas debido a que es un gran personaje. Pareciera que está mirando hacia el pueblo de Tepoztlán, observando atento las fiestas y todas las situaciones de la vida diaria de Tepoztlán.
Como se dijo anteriormente, este es uno de los cerros más conocidos de Tepoztlán, ya que en su cima se encuentra lo que fue el templo el rey Tepozteco. Esta pirámide fue edificada en 1150 d.C. aproximadamente y fue dedicada a Ometochtli (Dios dos conejos) y a Tepoztécatl (Dios del pulque, la fertilidad y la cosecha). Cada 8 de septiembre se sube a la pirámide a hacer una ofrenda en honor a Tepoctécatl y se celebra la fiesta principal de Tepoztlán.
Su nombre proviene de la palabra náhuatl ¨tlahuilli¨que quiere decir ´luz. Es el cerro más alto por el que se sube al Tepozteco. Probablemente ahí se hacía algún rito relacionado con el fuego nuevo, pues existen narraciones que dicen que cuando es año nuevo, quienes tengan el don de la suerte y suben a las 12 de la noche a la cumbre de este cerro, pueden mirar una luz que alumbra gran parte del cerro, para apagarse enseguida.
Ehécatl quiere decir ¨Viento¨ o ¨Aire¨ en náhuatl, y a esta zona se ubican los corredores del viento. Algunas personas dicen que este cerro se llama así porque ahí se encuentra un agujero grande donde sale mucho aire, además de que, según la leyenda del Tepozteco, aquí estaba la casa del padre del Tepozteco, y el Tepozteco también es el dios del aire, por ello cuando se enoja, suelta mucho viento al pueblo.
Quiere decir “Cerro del zacate torcido” ya que Malinalli quiere decir ´hierba o zacate´ en náhuatl. Se le ubica como un cerro donde hay un manantial porque antes ahí se iba a buscar agua. Malinalli también es movimiento, como el agua se precipita desde muy alto, es conocido también como cerro del remolino.
En este cerro abundan las veredas por ello le pusieron así, además que ´Ohtli´ quiere decir camino o vereda en náhuatl. Este cerro ha sido muy importante desde tiempos remotos, ya que por ahí transitaban las personas que rendían tributo a los pueblos dominantes en su tiempo, además de llevar ofrendas, los peregrinos también ocuparon esos caminos para hacer procesiones, ahí hay un sendero muy conocido para llegar a Santo Domingo Ocotitlán.
En la colonia Huilotepec se halla este pequeño cerro. Se le nombró así porque anteriormente ahí les gustaba llegar a las aves migratorias que venían de otros lugares. Cabe mencionar que ´huilotl´ significa paloma en náhuatl.
´Yahualli´ significa noche en náhuatl y ´tecatl´ vigilante ´Yohualtecatl´ puede traducirse como vigilante de noche. Esto es porque en tiempos de la revolución desde este cerro se vigilaba y alertaba con antelación de la llegada de enemigos que pudieran hacer daño a los revolucionarios y habitantes del pueblo. También se le conoce como el cerro del enano porque tiene forma de un enano acostado, en la cima de este cerro se pueden hallar vestigios de una pirámide además de algunas tumbas y un gran horno de cal.
También conocido como “las cabecitas”, el cematzin que en náhuatl quiere decir ´Ce´ uno y ´maitl´ mano, por ello es el cerro de la mano. Además, debajo de este cerro hay otro que parece una pezuña y como en su momento en Tepoztlán se popularizó la ganadería y usaron bueyes en trabajos de campo, este cerro también es conocido como el cerro “pata de buey”.
Este gran cerro que da la bienvenida o despedida a los visitantes que vienen de Ciudad de México o Cuernavaca, también conocido como cerro del tesoro (ya que en lengua nahuatl Chalchi´´significa Piedra preciosa o tesoro) da pie a varias historias; algunos comentan que en el interior de este cerro hay cuevas con aire y riquezas. Además es muy apreciado por los habitantes porque comentan que dentro de él hay cuevas que conducen agua a través de ríos subterráneos que proveen a su comunidad y tierras, por ello en mayo se hace la tradicional petición de lluvias, un ritual a los Ahuaques. Celebración y ofrenda a los aíres del pueblo de Tepoztlán para pedir por un buen temporal.
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